
Perdóname, Mundo, porque estaba viviendo la vida.
Perdóname, Vida, porque estaba viviendo la de otros.
Oxígeno es lo que me faltaba
El camino se me antojaba muy largo, tanto, que ni me había dado cuenta de que me había perdido. Escogí una desviación que pensaba me llevaría a ese lugar donde querría estar siempre. Me equivoqué, pero aún no lo sabía. Aún no sabía que me quedara sin oxígeno.